Andalucía tiene una frontera natural, poco conocida, en la costa con Murcia que se llama PULPÍ, un municipio de la provincia de Almería que nada tiene que envidiar a los paraísos que nos ofrecen los documentales de viajes.
En una pequeña extensión de terreno nos encontramos con las islas de Terreros y Negra ambas Monumento Nacional con una impresionante fauna y flora acuática. Playas urbanas y calas tranquilas, de arena fina y dorada, con aguas transparentes de gran calidad, poco profundas y un clima con una temperatura media de 18,4 ºC, una invitación que no se puede rechazar.
El castillo de San Juan de los Terreros construido en 1764 y catalogado como Bien de Interés Cultural, en su día, fuerte para la vigilancia y defensa costera, con unas vistas impresionantes, y donde, además, podemos contemplar una interesante exposición de minerales y vivir la visita virtual a la Mina y a la GEODA GIGANTE, una joya de la naturaleza que no podemos dejar de visitar.
Además, Pulpí ofrece al visitante otras oportunidades de ocio, actividades náuticas, senderismo, y cuenta con un moderno campo de golf que da frescura y verdor a su entorno, un lugar para relajarse y olvidarse del estrés.
Y para reconfortar el ánimo, podemos disfrutar de una exquisita gastronomía, carnes, pecados y mariscos, platos tradicionales elaborados con magníficos productos de su agricultura local, como los Cogollos de Pulpí, que esperan obtener su nombre propio, con la Denominación de Origen.
La GEODA GIGANTE, se encuentra en el interior de la Mina Rica, a los pies de la Sierra del Aguilón, como si de un particular Valle de los Reyes se tratara, y en las entrañas de la tierra, el sarcófago mas extraordinario, que ningún humano hubiese podido construir.
La geoda fue descubierta, casualmente, por un grupo de mineralogistas en año 1999, en la cavidad de una roca tapizada por cristales transparentes de yeso, con un tamaño de ocho metros de longitud y dos metros de altura. Esta maravilla de la naturaleza, actualmente, es la única geoda visitable, a nivel mundial.
La visita a esta mina se convierte en una experiencia inolvidable gracias a las didácticas explicaciones de los guías profesionales, que te introducen en su historia y te llevan a lo largo de más de un kilómetro de túneles, y centenares de escalones, para conocer el durísimo trabajo de aquellos mineros incansables que finaliza con la explosión visual y emocionante de la GEODA GIGANTE.
Indiscutiblemente, este pequeño municipio almeriense es un paraíso en el Mediterráneo y aquellos que han tenido el privilegio de visitarlo y disfrutar de sus encantos, indiscutiblemente, querrán volver.